viernes, 8 de enero de 2010

Cómo aprende la matemática el estudiante ciego

CÓMO APRENDE LA MATEMÁTICA EL ESTUDIANTE CIEGO?
Las matemáticas son consideradas como una herramienta intelectual potente que proporciona privilegios y ventajas intelectuales a quienes son capaces de dominarlas. Algunos profesores de matemáticas afirman que es utópico pensar que el estudiante ciego pueda alcanzar un dominio siquiera aceptable de las matemáticas ya que la carencia de visión impide, al individuo que la padece, adquirir un conocimiento completo de las cosas. Quienes así piensan, posiblemente desconozcan que sólo en el interior de cada ser humano habita la verdad y que la persona ciega también puede ser capaz de interiorizar complejas representaciones de lo abstracto matemático puesto que para la razón cognitiva humana lo más importante es el concepto intelectual o imagen conceptual que cada individuo se forme de las cosas y no la aparente imagen formal de las mismas.
Si se le brinda la oportunidad, el estudiante ciego puede escoger el camino mas apropiado para él de acuerdo con su vocación. Para muchos ciegos, la vocación por el arte ha sido algo así como una redención; una forma de supervivencia. Esto no significa, sin embargo, que no hayan existido, existan o, sigan existiendo ciegos con alguna vocación científica y deseosos, al igual que Newton, de iniciar una travesía por el mar de la ignorancia en busca de la verdad objetiva de la ciencia. El niño ciego que llega a la escuela, como los demás niños, es también un científico en miniatura, un potencial amante de la ciencia y como tal hay que verlo y orientarlo intelectualmente en el camino que él libremente escoja de acuerdo con su vocación.
Éste pequeño científico ciego que llega a la escuela, sin embargo, sólo acude a sus disposiciones intuitivas ya que carece de un pensamiento estructurado que lo pudiera elevar a la categoría de científico. El carácter intuitivo de la mente infantil hace que el niño ciego cometa muchos errores; pero, a medida que su pensamiento se va estructurando, estos errores se reducen considerablemente. Se hace necesario, por tanto, potenciar el pensamiento lógico – matemático del niño ciego desde muy temprana edad teniendo en cuenta que la lógica es la ciencia de las leyes del pensamiento.
Una enseñanza verbal de la matemática, sin embargo, no es suficiente para potenciar el pensamiento lógico – matemático del niño ciego; sólo con la ayuda de mediadores se puede lograr éste objetivo. Para el trabajo pedagógico con el estudiante ciego y los demás niños en el aula regular el maestro puede utilizar materiales como: bloques lógicos, creados por Z. Diennes, regletas de Cuisinaire, ábacos abiertos, bloques multiusos, geoplanos, regletas para fraccionarios y muchos otros que transformarán la clase de matemática en una serie de actividades lúdicas. Usando estos materiales con la orientación del profesor, todos los estudiantes de la clase, incluso el niño ciego, podrán aprender significativamente los conceptos, relaciones y operaciones de una ciencia tan compleja como la matemática.